La iniciativa completa 10 años potenciando procesos de inclusión social territorial, económica y habitacional en zonas de Cundinamarca.
Según un informe del 2022 de la OCDE, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, que trabaja para enfrentar los desafíos económicos, sociales y ambientales a nivel internacional, y de la cual Colombia es miembro desde el 2020, el 42,1% de la población colombiana vive en regiones rurales, porcentaje ligeramente superior al promedio general (41,4%) y al de otros países latinoamericanos vinculados a dicha organización, como México (35%) y Chile (30%).
Además, el informe menciona que la mayor parte de la población se ubica en regiones rurales remotas (16,9%), casi el doble de la concentración en el promedio OCDE (8,9%). Asimismo, aunque en 2024 la economía registró el tercer mejor repunte entre los países miembros de la OCDE, las regiones rurales siguen enfrentando desafíos estructurales históricos que limitan su acceso a oportunidades de bienestar, progreso y desarrollo.
Una apuesta por el bienestar rural
Justamente, como respuesta a este panorama, Compensar viene trabajando, desde hace una década, en pro del desarrollo rural de Cundinamarca mediante su programa de bienestar rural, que potencia los procesos de inclusión social territorial, económica y habitacional de las comunidades rurales, alineándose con los estándares de bienestar rural dictados por la OCDE e impactando a lo largo de la última década a cerca de 37.500 personas.
“Esta apuesta inicia hace cerca de 10 años en el contexto nacional del Acuerdo de Paz, más específicamente en lo relacionado con el punto 1 de la Reforma Rural Integral, con el objetivo de contribuir al desarrollo de territorios rurales de Cundinamarca con alto nivel de vulnerabilidad e impacto por el conflicto armado. A lo largo de este tiempo y fruto del reconocimiento de las realidades y necesidades de cada territorio, desde un proceso de inmersión y de construcción colectiva con las comunidades, los entes territoriales, las agremiaciones, la academia y el sector privado, nuestro modelo se ha ido adaptando, flexibilizando y diversificando su alcance, entrelazando su objetivo con las metas de desarrollo rural que hacen parte de la agenda nacional e internacional, por ejemplo con los ODS o las metas de la OCDE”, explicó Claudia Romero, especialista de ruralidad de Compensar.
El programa inició en tres municipios del noroccidente de Cundinamarca y, actualmente, hace presencia en un total de 15 poblaciones, entre ellas, La Palma, Yacopí, Caparrapí, Pacho, Guaduas, Chaguaní y Albán, pasando de cubrir 546 beneficiarios anuales, a más de 7 mil reportados solo durante el 2024, un crecimiento exponencial que se orquesta bajo la visión de plataforma de bienestar integral de Compensar que une redes de trabajo público privadas, sumadas a los saberes propios de los pobladores, y que, en los próximos cinco años, espera extenderse a 21 municipios.
Hacia el desarrollo de territorios sostenibles
El programa de Bienestar Rural de Compensar contempla tres ejes de acción. El primero, inclusión económica, mediante el fortalecimiento de vecindarios productivos. El segundo, el eje de inclusión habitacional, orientado a mejorar las condiciones habitacionales de las comunidades y el otorgamiento del subsidio de vivienda rural para mejoramiento o construcción en sitio propio y, finalmente, el eje de inclusión social territorial, enfocado en el fortalecimiento del liderazgo y el empoderamiento comunitario, así como en programas formativos dirigidos a niños, jóvenes y personas mayores.
“Trabajamos de manera articulada estos tres ejes, fortaleciendo todos los procesos de sostenibilidad, generando, además, capacidad instalada, empleo y productividad, muy en coherencia con nuestro propósito de aportar a la consolidación de familias más sanas, productivas y felices en nuestros territorios rurales”, agregó la especialista de ruralidad de Compensar.
El impacto de la gestión desarrollada en estas tres líneas de acción es evidente. Destacándose, por ejemplo, en el frente de habitabilidad, un incremento del 311% en la cobertura de adjudicación del subsidio de vivienda rural (CSP, mejoramiento) y programas de habitabilidad, beneficiando a la fecha a 670 familias rurales; tan solo en 2024 el valor total adjudicado por este concepto superó los $8.941 millones.
Por otro lado, a través del frente de inclusión social territorial Compensar trabaja en el fortalecimiento del liderazgo y el empoderamiento de las mujeres rurales, así como en el desarrollo de habilidades y capacidades para fortalecer el tejido social en la región, en alianza con fundaciones, ONG y administraciones locales y regionales para brindar una oferta más completa y asequible a la población, y, fruto de ello, más de 60 mujeres rurales han participado en procesos de fortalecimiento asociativo.
“Buscamos generar aprendizajes significativos a partir de estrategias experienciales que invitan a las participantes a aprender haciendo, generando impacto en el nivel del ser, del hacer y del saber hacer, proporcionando herramientas y recursos específicos que fortalecen las habilidades de liderazgo, la autoconfianza y la resiliencia, empoderándolas para que se conviertan en agentes de cambio en sus comunidades, desde la incidencia en políticas públicas y el desarrollo de emprendimientos”, puntualizó Romero.
Las apuestas al futuro
Finalmente, en el eje de inclusión económica, 8 asociaciones de productores han logrado ser hoy proveedores directos de Compensar, tras un acompañamiento integral en los componentes técnicos, de comercialización y financieros, pasando de registrase compras por 247 millones en 2023 a 650 millones de pesos en 2024, en productos agrícolas. A lo anterior se suma la gestión de cerca de $250.000.000 para iniciar la construcción de una planta de beneficio de café con capacidad de producción proyectada de 3000 kg día, que favorecerá de manera directa a 19 familias caficultoras y de manera indirecta a 110 más, quienes en su mayoría han hecho parte de procesos de retorno a sus tierras.
“A través de este programa no solo esperamos impulsar el desarrollo en el campo, sino contribuir a sembrar paz en los territorios. Por eso, desde una visión de innovación social sostenible y sustentable, y alineados con nuestro modelo de bienestar integral, seguiremos articulando redes solidarias que nos permitan extender el impacto de nuestra gestión por muchos años más, para contribuir a su progreso y bienestar integral”, concluyó Claudia Romero, especialista de ruralidad de Compensar.