El aislamiento ha resultado positivo para la sociedad, pues entre otros, el ser humano ha comprendido que debe imperar el bien común sobre el individual. ¿Qué otros aprendizajes nos está dejando la cuarentena? Descúbrelos a continuación.
Desde luego, nadie esperaba que este año (2020) iba a estar en su casa realizando las actividades que acostumbraba a hacer fuera de su hogar como trabajar o estudiar. Otras personas que planeaban casarse, viajar, lanzar un nuevo producto o asistir al concierto de sus sueños tuvieron que cambiar repentinamente sus planes.
Así que, como afirma la psicóloga Marcela Valle Cuéllar, “es normal que la crisis del coronavirus genere un mecanismo de defensa. Algunas personas lo manejan desde un estado de negación, otras ven esta pandemia como una oportunidad para disfrutar el día a día; en cambio, algunas entran en pánico y empiezan a experimentar sensaciones de angustia, miedo e incertidumbre”.
Todas estas emociones son válidas, puesto que el ser humano necesita vivirlas para transformarse. Por ello, Marcela Valle Cuéllar, logoterapeuta y directora del Centro de Atención Familiar Sanar Psicoterapia, nos cuenta sobre los 14 aprendizajes de la cuarentena para que puedas convertir esta crisis en una oportunidad de vida.
- Aprender a cuidarnos de nosotros mismos: el autocuidado es la base para comprender que si estamos bien física, espiritual y emocionalmente podemos dar lo mejor de nosotros para quienes hacen parte de nuestra vida.
- Ser empáticos. Debes entender las situaciones físicas y emocionales que están pasando los demás. Por esta razón, si tienes un familiar que está pasando una situación difícil en este momento, quizás esta persona esté de mal humor. Por ello, no actúes de manera reactiva, no lo juzgues, sino que mejor ponte en su lugar, guardar silencio y sé tolerante.
- Valorar el tiempo que pasamos con nuestros seres queridos. Antes vivíamos afanados y no teníamos tiempo para agradecer y disfrutar de la compañía de los demás. Por ello, aprovecha la tecnología y acércate a quienes estimas para hablar con tus compañeros de trabajo, familiares lejanos.
- Unirnos en familia. Este es un gran momento para crear lazos y vínculos más fuertes entre nuestra familia. Es importante fortalecer valores como el respeto, la tolerancia, la empatía y humildad. Si tienes hijos ten presente que si ellos ven que estás ayudando a los demás, les estarás comunicando la importancia de ser solidario.
- Ser agradecido: “si no eres feliz con lo que tienes, tampoco lo serás con lo que te falta” esta frase siempre la debes tener presente para agradecer que estás vivo y aunque en este momento no lo veas tan claro, cuentas con las herramientas necesarias para salir adelante.
- Valorar a las personas que diariamente trabajan para que estés bien. En ocasiones, existen algunas profesiones u oficios que pasan desapercibidos. Por ejemplo, el personal de aseo, las personas que realizan domicilios, tenderos, incluso, hasta los profesionales de la salud. En ese sentido, es momento de aplaudir a quienes están arriesgando su vida para cuidarnos y brindarnos bienestar.
- Fomentar la solidaridad. No hay duda de que se está recuperando la confianza por el otro. Muchos jóvenes están ayudando a los adultos mayores, otras personas están donando mercados, y algunas han decidido aceptar bajar su salario para ayudar a los empresarios a enfrentar la crisis. Esto son actos que demuestran que el ser humano es solidario por naturaleza. Esto es lo que nos va a ayudar a resolver esta crisis.
- Darle prioridad a lo importante y no a lo urgente. A veces, las obligaciones laborales hacen que se nos olviden que debemos priorizar nuestra salud y familia. Por ello, recuerda que tu bienestar físico y emocional es prioridad.
- Entender que el bienestar colectivo es más importante que el individualismo. Somos seres sociales por naturaleza, por ende, necesitamos del otro. Por lo tanto, no es momento para ser egoísta, al contrario, debemos ayudar a quien lo necesita. Recuerda que, si los demás estás bien, tú también lo estarás.
- Cuidar y disfrutar la naturaleza. En Bogotá se están escuchado con más frecuencia el cantar de los pájaros, las aguas de la bahía de Cartagena se están volviendo cristalinas. En Neiva apareció una zarigüeya cargando sus crías y caminando por un andén. Estos hechos nos demuestran que el ser humano no es el centro del mundo, sino que hacemos parte de la naturaleza.
- Aprender a expresar palabras de cercanía. No olvides decirles a las personas que estimas cuánto los quieres y qué tan importantes son para ti. A veces hay quienes necesitan escuchar o recibir una palabra de aliento.
- Despertar la creatividad. La cuarentena ha generado una amplia oferta educativa y cultural, tanto así que hoy es posible hacer recorridos virtuales a los museos más emblemáticos del mundo. Todos estos estímulos despiertan la creatividad que habita en nosotros. Nunca dudes de tu creatividad, esta es inherente al ser humano, solo vuélvete a reconectar con tu capacidad de asombro.
- Vivir y disfrutar el presente con un sentido. Pregúntate cuál es tu propósito, qué es lo que te motiva a levantarte cada día, esto te ayudará a comprender lo que estás viviendo ahora.
- Reconoce que eres un ser vulnerable. Por eso, está bien solicitar ayuda cuando la necesitas, no temas hacerlo y deja a un lado la pena si necesitas apoyarte en los demás. De igual forma, también es importante impactar positivamente al otro y dejar en ellos una huella positiva. Por eso, responde esta pregunta: ¿cómo quieres ser recordado?
Estos son algunos aprendizajes que nos está dejando la cuarentena, seguro que en el camino se encontrará más. “Lo importante es entender que hay que vivir el día de la mejor manera porque lo único seguro es el presente”, concluye la experta.