Aprende a elevar el colesterol bueno (HDL) y reducir el colesterol de baja densidad (LDL), siguiendo estos consejos de la fisioterapeuta Indira Rodríguez y la enfermera Margarita Pomar de la Universidad de La Sabana.
¿Qué es el colesterol?
De acuerdo con la enfermera Margarita Pomar, docente de la Universidad de La Sabana y quien cuenta con más de 11 años de experiencia en unidades de cuidado intensivo adulto, quirúrgico, neurocrítico y cardiovascular “el colesterol es una sustancia serosa, es decir, es parecida a la grasa. Su importancia radica en que esta se requiere para que se produzcan algunas hormonas del cuerpo como la vitamina D y otras sustancias que nos permiten digerir alimentos. Se encuentra principalmente en alimentos de origen animal como las yemas del huevo, carne y quesos”.
“Si bien el colesterol produce células sanas, cuando este se presenta en grandes concentraciones puede derivar enfermedades cardíacas u otras alteraciones que afecten el organismo”, anota la fisioterapeuta Indira Rodríguez, miembro del grupo de investigación Movimiento Corporal Humano con actividades investigativas en la línea de Interacción Fisioterapéutica.
Recuerda que, en este propósito la actividad física es indispensable; por ello, puedes inscribirte a deportes que te saquen de la rutina y mejoren tu sistema cardiovascular.
Tipos de colesterol
“Existen dos tipos de colesterol: el de baja densidad (LDL) que se produce cuando hay altas concentraciones de colesterol en el cuerpo. Al no tener a dónde ir se aloja en los vasos sanguíneos, generando que estos se obstruyan y produzcan una alteración en la función cardiaca. Por el contrario, se encuentra el colesterol bueno (HDL) que se encarga de separar el colesterol de la sangre y disolverlo en el hígado. Este se acumula para producir una serie de células que generan una fuente de energía que posteriormente sirve para realizar cualquier tipo de actividad y movimiento”, explica Indira Rodríguez, profesora del programa de Fisioterapia de la Facultad de Enfermería y Rehabilitación de la Universidad de La Sabana.
¿Qué diferencia hay entre los triglicéridos y el colesterol?
Margarita Pomar señala que “los triglicéridos son el marcador que nos indica el almacenamiento de las calorías no utilizadas, estos aportan energía para que las células trabajen, mientras que, el colesterol favorece a la producción de hormonas y vitaminas, por lo que la diferencia cuando tienes los triglicéridos altos es que esto indica que los depósitos calóricos, mientras que el colesterol es la grasa que está adherida a los vasos sanguíneos”.
Esto significa que los triglicéridos altos son indicativos de obesidad, mientras que el colesterol alto es un indicativo de riesgo coronario.
¿Qué eleva el colesterol alto?
“Existen dos factores que pueden influir, el genético que significa que en la familia existe una condición que se llama hipercolesterolemia, que influye en el aumento de colesterol, y tener hábitos de alimentación no saludables como fumar, consumir grasas saturadas como alimentos ultraprocesados y no realizar actividad física”.
¿Cómo prevenir el colesterol alto?
Si no estás acostumbrado a realizar actividad física, “recuerda no plantearte metas altísimas de cansancio, así no disminuyen la intensidad del ejercicio al día siguiente, en cambio, realiza actividad física de baja intensidad para que puedas ejercitarte durante toda la semana”, concluye la fisioterapeuta Indira Rodríguez.
Con estos consejos controlarás tu colesterol, al mismo tiempo, que contarás con la energía necesaria para realizar todas tus actividades diarias. No olvides cuidar tu alimentación, incluso en épocas navideñas, para evitar complicaciones de salud y por supuesto realizar una actividad física.
