¿Es posible mantenerse alegre la mayor parte del tiempo? Conoce tu porcentaje de felicidad y los hábitos que te ayudarán para estar alegre y apreciar las cosas bellas de la vida. ¿Qué porcentaje de felicidad hay en tu vida? Realiza el siguiente test y conócelo:
A continuación, Marcela Valle Cuéllar, Psicóloga de la Universidad Javeriana; con Formación en Psicología Existencial y Logoterapia y Psicología, te da unos consejos útiles para encontrar la felicidad en el día a dìa:
- Aprende a reconocer lo que te hace feliz
Según la doctora Marcela Valle Cuéllar, “la felicidad es encontrar paz a pesar de que las cosas no sean perfectas”. Con este mensaje nos enseña que algo que podemos hacer para identificar la felicidad en cada momento, es entender que muchas cosas no saldrán como esperamos, nada es perfecto, pero podemos sacar cada aspecto positivo de lo que vivimos, sentirnos satisfechos y felices por cada logro y cada momento que vivimos.
- Entender que no todos encontramos la felicidad de la misma manera
“No todos encontramos la felicidad de la misma manera porque cada persona es única y singular”. Afirma la doctora Marcela Cuellar. El porcentaje de felicidad varía de individuo a individuo y un error muy común es caer en la comparación. Por ejemplo, para muchos la felicidad es tener dinero, un carro, una familia, pero para otros simplemente no. Lo ideal en estos casos es reconocer las emociones que sentimos frente a diferentes situaciones, actividades, personas, etc… Y con ello, encontrar un significado y un valor personal que nos brinde felicidad.
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- Consejos para ser felices con lo que tenemos
Algunas veces estamos más centrados en lo que no tenemos que en lo que tenemos y para eso, la doctora Marcela, nos tiene un par de recomendaciones:
● Aceptar. No es quedarnos sentados aceptando todo lo que pasa sino entender que no podemos cambiar algunas situaciones pero sí nuestra actitud frente a ellas. Ser agradecidos, porque quien no es feliz con lo que tiene, tampoco lo será con lo que no tiene. Darnos cuenta de que tenemos el privilegio de estar vivos, de tener un hogar, una cama, alimentos, familia, amigos, trabajo, sueños. Cuando uno se da cuenta de todo lo que lo rodea y lo valora, va a tener una vida muy feliz.
● Hacer las cosas con amor. Todo lo que hacemos en nuestra vida debe venir desde el amor para poder hacerlo con pasión, cuando actuamos de esta manera y nos llenamos de sentimientos poderosos como estos, estamos alcanzando la felicidad.
● Haz una lista. Muchas veces no logramos identificar nuestro porcentaje de felicidad y eso es normal en un mundo que se mueve tan rápido. La doctora Marcela cuellar nos recomienda este punto como forma para ser más agradecidos: “haz una lista de todo lo que tienes, empezando por la parte física, la salud, por lo que a veces damos por obvio como las personas que nos aman y amamos, las cosas con las que contamos y en general todas las cosas simples que damos por sentadas. Hacer esto, nos va a ayudar a identificar todo lo que tenemos y hemos construido y asimismo para ser felices”.
● Cuídate. Una vez nosotros identificamos las cosas que nos hacen felices, empezamos a cuidarnos más. Es importante realizar ejercicio y cuidarse en la alimentación, no solo por el aspecto físico, sino también por el bienestar emocional que producen estas actividades.
4. Cultivar la felicidad en los niños
Como padres, existe la responsabilidad de tener niños felices y según la doctora Marcela Cuéllar, esto se logra desde el ejemplo. “Cuando acompañamos a nuestros hijos amorosamente y afectivamente en las situaciones que ellos pueden enfrentar, estamos ayudándoles a encontrar la felicidad. Cuando afrontamos momentos duros con madurez, con sensatez y con tranquilidad somos el ejemplo y de cierta manera estamos “contagiando” la felicidad a nuestro alrededor y esa es una felicidad genuina y no fingida. Recordemos la frase de Nietzsche: “Aquél que tiene un porqué para vivir, puede soportar casi cualquier cómo”.
Es importante reconocer que a veces no es posible identificar aquellas cosas que nos hacen felices por intuición propia o porque en ocasiones las situaciones de la vida nos hacen sentir abrumados. Si este es tu caso, no dudes en buscar ayuda profesional, recuerda que hay muchos especialistas que pueden acompañarte.
