Si quieres encontrar una solución a un problema o crear un nuevo producto o proyecto, es el momento de reunir a tu equipo de trabajo y hacer una lluvia de ideas o brainstorming para sacarlos del bloqueo mental y llevarlos a proponer no una, sino muchas soluciones.
¿Qué es una lluvia de ideas?
La lluvia de ideas, también conocido como brainstorming, es un método de intercambio de ideas creado por el publicista Alex Faickney Osborn, que tiene como objetivo encontrar, de manera colectiva, diferentes soluciones a determinado problema o desafío.
Ventajas de la lluvia de ideas
De acuerdo con el publicista Mauricio Echavarría, director creativo en la agencia digital Indexcol “el brainstorming es una buena herramienta para estimular la creatividad porque se realiza en un grupo de personas que se desempeñan en diferentes campos, obteniendo así distintos puntos de vista de la idea o producto final que se va a sacar”.
Es por esta razón que “se alcanza a crear un proyecto completo que suple las necesidades de todos los campos. Asimismo, permite testear las ideas en el mismo momento en el que las estamos lanzando para de esta manera saber si son funcionales o no, porque yo puedo tener una idea, pero si al expresarla la mitad de las personas no la comprenden, quizás esa no sea la opción o al no comprenderla también genera que otras personas las complementen y así se desarrolla una idea más estratégica”.
¿Cómo hacer una lluvia de ideas?
Lo primero que debes hacer es designar un moderador que guíe las intervenciones, así como, una persona encargada de anotar las ideas que los demás participantes vayan expresando. Para el desarrollo de la sesión, el moderador debe comenzar explicando cuál es el objetivo de esta, recordar cómo se va a llevar a cabo la actividad y resaltar que está prohibido criticar o poner límites a la imaginación del otro, así como, poner “peros”, mejor optar por complementar y añadir soluciones creativas.
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Aplicar el método Scamper en la lluvia de ideas
El publicista Mauricio Echavarría señala que “el método Scamper, creado por Bob Eberlee, es una metodología que se usa para generar ideas innovadoras. Scamper significa: sustituir, combinar, adaptar, modificar, proponer otros usos, eliminar y reordenar. Para desarrollarlo debes primero seleccionar la idea, producto o servicio existente y ubicarlo en el centro, después distribuyes siete hojas que representan la lista de verificación SCAMPER. A partir de eso, se realizan preguntas como: ¿qué se puede sustituir sin afectar el resto del proyecto? ¿Qué no se puede sustituir en ninguna circunstancia? Después, pasas a combinar y en este punto el objetivo es unir dos ideas o etapas del proceso en una más eficiente, entonces la pregunta es: ¿cómo se pueden combinar varios proyectos? En adaptar se busca ajustar el producto o la idea para mejorar su calidad, en modificar se cuestiona ¿cómo podría modificar el olor del producto o experiencia de cliente? Proponer consiste en tomar ese producto para diferentes propósitos, por ejemplo: ¿qué productos se pueden crear a raíz del actual? Eliminar se basa en sacar esas partes que afectan el proceso o eliminar riesgos y errores. Por último, reordenar es cómo se puede organizar determinado ítem desde el interior de la empresa como reestructurar la página web”.
Esta es una metodología que puedes usar para hacer la lluvia de ideas, también puedes implementar brainwalking (capturar ideas espontáneas en tu trabajo diario) o brainwriting (recopilación de ideas escritas y luego el moderador recoge las notas de los demás). El objetivo final es generar este tipo de espacios que te lleven a ti y a tu equipo de trabajo a innovar y estimular la creatividad.
No obstante, y más allá de la metodología, al realizar una lluvia de ideas recuerda que como concluye Mauricio Echavarría, “todas las ideas que tenemos necesitan nutrirse de otros, por eso las ideas no son de una sola persona, sino que son creadas por varias mentes. Siempre vamos a necesitar de otros para lograr algo grande, funcional, conocido y exitoso”.