En Navidad, la comida siempre es protagonista, y es difícil resistirse a tanta variedad. La clave es disfrutar con moderación. Por eso te compartimos las claves para saborear cada plato sin sentirte culpable.
Natilla, buñuelos, postres y una infinidad de preparaciones se toman las mesas esta Navidad, haciendo de esta época un momento ideal para disfrutar y celebrar en familia. Sin embargo, entre tantas tentaciones, es fácil perder el equilibrio en la alimentación.
La doctora Carmen María Carrero, especialista en nutrición clínica y profesora investigadora de la Universidad de La Sabana, señala que abusar de alimentos como embutidos, quesos, dulces navideños, refrescos y bebidas azucaradas o alcohólicas puede tener un impacto negativo en tu salud, debido a su alto contenido de azúcares, grasas saturadas y sodio.
Pero ¿cómo disfrutar sin excesos? A continuación, te compartimos algunas recomendaciones para que disfrutes tus comidas favoritas esta Navidad, cuidando tu salud sin renunciar al placer de saborear cada bocado. ¡Toma nota!
¿Cómo afectan a la salud los excesos navideños?
Las costumbres alimentarias típicas de esta época, como señala la doctora Carmen María Carrero, pueden perjudicar la salud si no se controlan adecuadamente. Entre estos hábitos perjudiciales se encuentran:
- Consumo excesivo de alimentos hipercalóricos
Ejemplos: asados, comidas fritas, buñuelos, natillas, panetones y turrones.
Consecuencias: aumento de peso, alteración de los niveles de glucosa en sangre, colesterol y triglicéridos elevados.
- Altos niveles de sodio en alimentos procesados
Ejemplos: embutidos, salsas preparadas, encurtidos, jamones y snacks.
Consecuencias: aumento de la presión arterial, especialmente en personas con hipertensión o problemas renales.
- Consumo descontrolado de azúcar
Ejemplos: bebidas azucaradas, galletas y postres tradicionales.
Consecuencias: mayor riesgo de resistencia a la insulina, diabetes tipo 2, caries y aumento de peso.
- Exceso de alcohol
Ejemplos: vino, champán, cócteles, cervezas y licores dulces.
Consecuencias: riesgo de intoxicación alcohólica, daño hepático, deshidratación y problemas cardiovasculares en personas vulnerables.
- Horarios irregulares de comida
Ejemplos: cenas tardías, comer en grandes cantidades o saltarse las comidas.
Consecuencias: indigestión, reflujo, alteraciones metabólicas y gastritis.
La doctora Carmen María Carrero, comparte cuáles son las claves para tener una alimentación sana, pero disfrutando de las comidas tradicionales de las celebraciones de Navidad.
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5 claves para disfrutar sin excesos tus comidas de Navidad
“Una alimentación variada, equilibrada y consumida en las cantidades adecuadas es la mejor forma de conseguir una dieta saludable y evitar los excesos en esta época”, destaca la doctora Carmen María Carrero. Otras recomendaciones incluyen:
- Planifica tus comidas: decide con antelación los menús para las celebraciones. Esto no solo te ayudará a evitar comer de más, sino también a aprovechar mejor los ingredientes.
- Llena tu plato de color: incluye siempre verduras y frutas. Opciones como ensaladas frescas, espárragos, alcachofas o piña no solo son deliciosas, sino que también ayudan a la digestión. Incluso puedes preparar entradas creativas con estos ingredientes.
- Elige frutas de temporada: la papaya, la ciruela o la piña son futas ideales para rematar una comida. Además, son más ligeras que otros postres tradicionales y están llenas de nutrientes.
- Cambia fritos por opciones más ligeras: asar, cocinar al vapor o a la plancha son técnicas que mantienen el sabor sin añadir tantas calorías. Prueba con carnes magras como pechuga de pollo, pavo o pescado; son deliciosas y saludables.
- Escucha a tu cuerpo: no es necesario probar todo lo que está en la mesa. Sirve porciones pequeñas, mastica despacio y aprende a reconocer cuándo estás satisfecho.
- Bebidas inteligentes: mantente hidratado con agua o infusiones de frutas. Una buena idea es añadirle limón o menta para darles un toque refrescante. Evita las gaseosas y, si consumes alcohol, hazlo con moderación.
Disfruta los sabores de la Navidad con equilibrio y sin culpas. Siguiendo estas recomendaciones, podrás saborear cada bocado con tranquilidad y cuidar de tu bienestar al mismo tiempo. ¡Felices fiestas!
