A pesar de los desafíos, un equipo de trabajo multigeneracional ofrece riqueza de experiencias, habilidades y perspectivas.
De acuerdo con los resultados de la encuesta salarial de Colombia, aplicada por el empleo.com en alianza con Talent Partner, el 46% de la fuerza laboral de Colombia pertenece a la denominada generación Millenials, de la que hacen parte los nacidos entre 1981 y 1993; el 26% a la Generación Z (1994 – 2010); el 20% a la Generación X (1969-1980) y el 6% restante a los Baby Boomers (1949-1968), lo que supone un gran reto para el ecosistema laboral, en la medida que, al mismo tiempo, conviven 4 generaciones diferentes, con sus diversas formas de ver el mundo, comprometerse, asumir el liderazgo, trabajar, entender las tareas y construir relaciones.
Así las cosas, hoy las organizaciones se enfrentan, como nunca, a un período de consolidación de una cultura marcada por la diversidad, pero además de consolidación, también es una etapa de transición en la que es crucial aprovechar lo mejor de cada generación y lo que pueden lograr juntos.
Para Claudia Rodríguez Bermúdez, coordinadora de Desarrollo Organizacional de Compensar, este panorama, por un lado, enriquece a las organizaciones, aportando habilidades y perspectivas únicas, además de conocimientos basados en experiencias propias de su dinámica generacional. “Sin embargo, la diversidad también pone a prueba la capacidad de mantener una comunicación oportuna, cercana y asertiva, así como la construcción de nuevos estilos de trabajo, que funcionen para todos”, puntualizó.
Siguiendo con Rodríguez, propiciar una cultura de respeto y apertura a la escucha y al diálogo, entender las dinámicas laborales, generar un ambiente inclusivo y equitativo con oportunidades para todos, promover la retroalimentación constructiva y reconocer e integrar las habilidades únicas, han sido algunas de las acciones que ha venido implementando la organización para generar un entorno más productivo y eficiente que comprenda, celebre y valore esas diferencias, lo que al final, enriquecen el tejido corporativo y social.
Y es que, cada generación tiene preferencias, necesidades, intereses, experiencias, habilidades y motivaciones diferentes, así lo demuestran los resultados de la ‘Encuesta Millennial y Gen Z 2022’ realizada por Deloitte, firma líder en servicios profesionales. Por un lado, la Gen Z y los millennials buscan equilibrio y oportunidades para crecer. El salario es la razón principal por la que dejaron a sus empleadores en los últimos dos años. Pero cuando se trata de lo que los hace elegir una nueva empresa para trabajar, el equilibrio entre el trabajo y la vida personal y las oportunidades de aprendizaje y desarrollo son sus principales prioridades. Lo anterior, sumado a la necesidad de conectar con el propósito de una organización, lo que solo es posible cuando este se encuentra alineado a su proyecto de vida. Una postura que dista de generaciones anteriores, quienes suelen tener otras expectativas, se sienten atraídas por los procesos estructurados de trabajo, y le dan gran valor a la estabilidad y al estatus que una posición les puede proporcionar.
A pesar de la distancia que a simple vista puede existir entre generaciones y los retos que las empresas deben asumir en la implementación de modelos de trabajo flexibles, diversos e inclusivos, así como en la actualización de infraestructuras tecnológicas orientadas a la agilidad y colaboración, son muchas las ventajas de la convergencia de personas de diferentes edades en el entorno laboral, que incluyen, entre otras, el aumento de la innovación y la creatividad, la mejora en la comunicación y participación, la toma de decisiones más equitativa y efectiva, y la solución de situaciones desafiantes de una manera más rápida y estratégica.
Así lo confirma la Coordinadora de Desarrollo Organizacional de Compensar, “somos conscientes del gran valor que aporta cada uno de nuestros colaboradores, e indistintamente de la edad, le atribuimos a ese equipo multifacético y diverso, aún a quienes gozan del retiro, los resultados obtenidos durante estos 45 años de historia. Y es por esto que, afrontamos el cambio generacional a partir de estrategias constantes de fortalecimiento de nuestra cultura, bajo la premisa de que, sin importar las diferencias, todos hacemos parte de una misma generación, la “Generación C”: distintas regiones, razas, edades, profesiones, roles y géneros, palpitando por el mismo sueño, el sueño de construir juntos una mejor sociedad”.