Impulsar la calidad en los procesos, promover un clima laboral positivo y fomentar el compromiso con la sociedad son algunos principios que conforman el código de ética. Conozca la importancia de aplicarlo a su organización.
El código de ética es un mecanismo que regula el cumplimiento de las metas de una empresa de forma efectiva. En él están incluidas los principios y valores que constituye la forma de pensar y de actuar de las empresas, por lo que sin este sistema regulador no sería posible evitar aspectos de corrupción o métodos que puedan generar daños tanto para la institución como para la sociedad.
El código de ética debe ser fomentado a través de programas de formación, comités, asesorías, sistemas de gestión, documentos formales u otros mecanismos que guíen a los trabajadores y directivos a desarrollar sus labores de forma honesta y responsable.
Cuando el código de ética se cumple, se promueve una cultura organizacional basada en valores y principios que no solo mejora los proceso y resultados, sino que impulsa componentes como confianza, lealtad y sostenibilidad frente al mercado y el público al que desea llegar.
Algunos resultados positivos que genera la implementación del código de ética en las empresas son:
● Los conflictos internos se reducen, mejorando el clima organizacional.
● Aporta valor a la comunidad o sector en el que se desempeña.
● Cuenta con excelente capital humano.
● Genera confianza a la actividad económica a la que se dedica.
● Los procesos son de alta calidad.
Transparencia en los procesos
Daniela Patiño Piñeros, Coordinadora de Relaciones Institucionales de la Red Pacto Global en Colombia, explica que en el código de ética se integran todos los principios de correcta o de buena conducta que exige una organización en un trabajador.
A través del código de ética, es posible que las empresas identifiquen cuáles son los comportamientos deseados en sus colaboradores, de tal forma que se prevengan posibles conductas que no sean favorables para la empresa. Si una organización tiene claramente definidos estos parámetros y si son socializados con su grupo de interés, se podrán evitar factores de riesgo que dañen los procesos de calidad y la buena imagen de la empresa.
Es fundamental que dentro del código de ética esté claramente definida la misión y visión de la empresa. Esto deja ver cómo se proyecta frente a los grupos con los que se relaciona. Hay que tener en cuenta que un código de ética varía de acuerdo a cada negocio, por lo tanto deben ser creados a partir de los principios fundamentales de cada una de ellas.
Por otro lado, los comportamientos y dilemas éticos cambian de acuerdo a las circunstancias a las que la empresa o el trabajador se enfrenta a diario, por lo tanto hay tres grandes pilares a la hora de crear un código de ética:
● Honestidad e integridad:se deben crear iniciativas que fomenten la integridad con todas las personas que conforman a la empresa. El buen comportamiento debe estar basado en la honestidad y la transparencia.
● Respeto y tolerancia: cada miembro de la empresa debe saber cuál debe ser su postura frente a los grupos a los que va a llegar.
● Impacto en las personas y el medio ambiente:las acciones y procesos de decisión deben ir direccionados a generar un impacto positivo en las personas y en el medio ambiente. Este punto es fundamental para establecer desde un principio los valores con los que se guiará la organización.
Cuando se tiene definido un código de ética se logran gestionar los debidos procesos antes de que se cometan fallas en el desarrollo de los deberes de un trabajador. Se previenen riesgos económicos, de reputación, legales, pérdida en la competitividad en el mercado, pérdida en la credibilidad con los clientes y del talento humano.
Si las empresas cuentan con programas anticorrupción y pautas éticas contundentes que sean compartidas con los miembros de la empresa hay hasta un 50% menos de incidentes de corrupción y menos probabilidades de perder oportunidades comerciales que aquellas que no cuentan con estos programas. Por ello es tan importante que las organizaciones apliquen un código de ética que integre a su organización con los compromisos empresariales y sociales que desea lograr.