Luciana es una niña de cuatro años que nació con retinopatía de la prematuridad, esto le produjo una ceguera permanente. Conoce su historia y cómo su mamá, a pesar de los obstáculos que ha enfrentado, le brinda a su hija las herramientas necesarias para salir adelante.
Eliana Gutiérrez, la mamá de Luciana, vivió un embarazo que la llevó a experimentar, tanto a ella como a su esposo, felicidad, alegría, anhelo, pero también preocupación, pues cuando asistió a una ecografía para saber si estaban esperando un niño o una niña, descubrió que su hija presentaba algunas complicaciones que la llevaron a tener un parto prematuro.
Con tan solo 6 meses de edad, Luciana nació con retinopatía del prematuro, un trastorno ocular que produce el crecimiento de vasos anormales dentro de la retina, llevando a la ceguera. Aunque fue sometida a un trasplante de córnea, este no generó los resultados esperados, generando una discapacidad visual.
“Fue un proceso muy duro, ver que esa persona tan pequeña e inocente tuviera que pasar por cuidados intensivos y varias cirugías. Sin embargo, hoy en día hay personas que ni se dan cuenta de la discapacidad visual de Luciana porque ella es una niña independiente”.
Conoce más detalles de la historia de Luciana mirando el siguiente video:
Compensar, a través del Centro de Desarrollo Infantil de Soacha, ratifica su compromiso por llevar bienestar integral a poblaciones priorizadas como los niños, pues cabe recordar que la inclusión en la educación es clave para el desarrollo de sociedades más justas y equitativas.
Por eso, garantizar que niños ciegos o con baja visión, puedan recibir una educación de calidad, sin necesidad de asistir a colegios especiales, es una de claves para reducir la brecha educativa en niños con discapacidad visual.
Descubre más de la gestión social de Compensar ingresando a este enlace.