La otitis es la inflamación del oído interno o externo y en determinados casos puede causar infección. Se presenta con mayor frecuencia en la infancia, pero puede aparecer en otras etapas de la vida. Conoce todo lo que debes saber acerca de la otitis.
¿Qué es la otitis?
De acuerdo con Ginna Lizbeth Gómez López, enfermera magíster en enfermería de la Universidad de La Sabana y especialista en cuidado crítico pediátrico “la otitis es la inflamación del oído que se presenta cuando la trompa de eustaquio se obstruye, la cual se encarga de conectar la parte del oído con la garganta y su función principal consiste en drenar el líquido que se produce en el oído medio, cuando este se ve afectado, se acumula y genera una infección, producida por algunos virus como el rinovirus o influenza, o bacterias como streptococcus grupo 1”.
Esta inflamación del oído mayoritariamente se presenta en menores de cinco años debido a que “en esta etapa la trompa auditiva es inmadura tanto en lo estructural como funcional, produciendo una mayor obstrucción. No obstante, también se presenta en población adulta”, explica Ginna Gómez.
Tipos de otitis
A continuación, Ginna Gómez, docente de la Universidad de La Sabana en los programas de pregrado en las asignaturas de cuidado al niño y al adolescente, te explica los tipos de otitis:
Otitis externa: se localiza en la piel que recubre el conducto auditivo externo. Generalmente quienes lo padecen practican deportes acuáticos o se puede originar por una fracción excesiva, ausencia de cerumen (cera de los oídos) que actúa como capa protectora impidiendo que cuerpos extraños o líquidos ingresen al conducto auditivo medio. También por la introducción de “bastoncillos de amor”, que comúnmente llamamos copitos o algún instrumento que penetre, generando gérmenes que causan este tipo de otitis.
Otitis media:
- Según tiempo de evolución: dura aproximadamente tres semanas y se conoce como otitis media aguda. Si dura entre tres semanas a tres meses se conoce como subaguda y cuando se extiende por más de tres meses se le conoce como otitis crónica.
- Según el tipo de afección: puede ser una meningitis, que es la inflamación de la capa externa de la membrana timpánica. También se encuentra la otitis media aguda supurativa, que es la infección del oído de corta duración y con presencia de pus. Tenemos la otitis secretoria, comúnmente llamada otitis media serosa, donde hay presencia de líquidos sin generar daños aparentes.
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¿Por qué se da la otitis?
De acuerdo con Ginna Gómez “se puede dar por antecedentes familiares. Influye también el sexo, suele presentarse mayoritariamente en niños. También si antes del sexto mes de vida el niño padece de otitis, va a ser más propenso a desarrollarla más adelante. Quienes son fumadores pasivos, ya sea electrónicos o tabaco, son propensos a padecer esta infección en la infancia. Por supuesto que el clima también es un factor para contraer otitis media”.
Ahora bien, ¿la otitis es contagiosa? Al respecto Ginna explica que “la otitis se puede dar por gérmenes, bacterias o virus. Esto genera que por el mismo agente patógeno sea contagiosa. No obstante, hay que tener en cuenta que el hecho de contener una infección en el tracto respiratorio no garantiza que vaya a pasar al oído medio. Son los microorganismos que pueden transmitirse de una persona a otra. Pero en el caso de la otitis externa no es contagiosa porque es causada por uso de humedad en el conducto auditivo”.
¿Cómo prevenirla?
Como la otitis se da frecuentemente en niños recuerda que “debes tener al día el esquema de vacunación para evitar infecciones bacterianas. De igual forma, si presentas una infección respiratoria contrólala para que no se complique. Baña al niño con agua y jabón, seca bien sus oídos, sin introducir bastoncillos de algodón. No lo expongas al humo del cigarrillo y si va a nadar lo recomendable es que use tapones. Y fomentar la lactancia materna porque esto produce anticuerpos ”, concluye Ginna Gómez.
Si tienes fiebre, dolor de oído, vértigo, entre otros síntomas, recuerda no automedicarte, visita a tu médico de cabecera para que sea él quien te dé el tratamiento adecuado.
