En el mundo laboral el estrés genera en la persona un constante miedo, producto de la convivencia con la angustia, la preocupación y la ansiedad que se refleja en un estado de irritabilidad, vacíos internos y falta de empatía.
Esto genera un incremento en cifras de inasistencias, incapacidades y alta rotación en los colaboradores de una compañía porque su sistema inmunológico se ve afectado por la constante generación de cortisol, que es una hormona corrosiva que acelera el envejecimiento de las células afectando la salud mental, física y emocional de la persona.
La forma de contrarrestar este estado es causando más liberación de serotonina, que, a su vez, es la hormona del bienestar y la felicidad.
Una de las más eficaces formas de hacerlo es la meditación y de la mano de ella, el ejercicio, la alimentación sana y generar espacios de reflexión e introspección.
Cuando meditas te conectas con interior; y estos minutos que dedicas a esa conversación con tu Yo interior es un llamado a la introspección.
La manera más eficaz para conectarse con tu interior es a través de la meditación La meditación es ese hábito que hará de ti una persona espiritual y serena. La meditación no es una terapia para poner tu mente en blanco, ni es una práctica religiosa. Es un ejercicio de conexión espiritual.
La meditación
Meditar es hacer pausa interior en el andar del agitado mundo, que se logra desconectando la mente de la fuente de información proveniente del exterior.
Por medio de la meditación silenciosa logramos el equilibrio de nuestra mente, cuerpo y espíritu.
Con el silencio y la respiración rítmica se logra la quietud de la mente y se neutraliza la calma disminuyendo las revoluciones de la máquina del pensamiento, disfrutando una mejor calidad de vida.
La meditación deber ser nuestra primera acción antes de recibir cualquier información del exterior.
Con el desarrollo de una meditación constante y continúa, se comienzan a presentar cambios en ti y los resultados positivos de tus deseos, empiezan manifestarse de forma inmediata.
Cuando meditas se eleva también tu estado de consciencia
La consciencia es el “yo interior”. Es nuestro compañero imaginario que actúa correctamente. Es el “yo” bueno, que busca la trascendencia de cada uno de nosotros como ser humano. Allí está el trabajador, el ejecutivo, el comercial, el profesional que necesita estar en balance emocional para salir a disfrutar la oportunidad que la da la vida de servirle al mundo a través de su trabajo.
Con la meditación diaria se promueve la transformación de una persona que va sintiendo cambios en su vida mientras observa el proceso lento de la nueva armonía. Con el tiempo conoce el mágico mundo de la serenidad y con ella la sabiduría que da como resultado pensar despacio para tomar decisiones acertadas aumentando la atención, la creatividad y el rendimiento.
Esos 30 minutos de conexión personal te proveen de una recarga de amor que necesitas para encender tu consciencia. Entonces se fortalece tu sistema inmunológico, se prende tu creatividad, se incrementa tu memoria, se entrena tu alma, se activa tu glándula pineal y se multiplica tu inteligencia.
La meditación te llenará de paz.
Es la voz de tu alma que llega para recordarte lo grande que eres y lo pequeño que es el ego que te acorrala para robarte tu paz.
La meditación es un ejercicio de constancia y paciencia, para conseguir resultados positivos para la salud, incluyendo la productividad laboral y la felicidad personal.
Juan Manuel Correal
@juanpapuchis
