La inadecuada disposición de residuos atenta contra el medioambiente, la salud, los derechos y el bienestar general de las comunidades.
Se estima que en el mundo se producen más de 2.100 millones de toneladas de basura, de las cuales solo el 16 por ciento es reciclada. Específicamente, en Colombia, este porcentaje asciende al 17 por ciento de las 12 millones de toneladas de residuos sólidos generados en un año, panorama que pone en alto relieve uno de los problemas más desafiantes alrededor del planeta, en la medida que atenta no solo contra el medioambiente, sino que, al mismo tiempo, impacta la salud, los derechos y el bienestar general de las comunidades.
Y es que, sin duda, la contaminación, el cambio climático, la escasez del agua y la superpoblación, por mencionar algunos, son de proporciones globales, y a propósito de la conmemoración del día mundial del medioambiente, que se celebró el 5 de junio, vale la pena generar una reflexión en torno a la necesidad de desarrollar una adecuada administración de los recursos naturales (para 2050 llegaremos a 9.700 millones de personas y los recursos serán insuficientes), lo que requiere del compromiso de gobiernos, sector privado, academia y sociedad en general.
En este escenario las empresas juegan un papel fundamental y es preciso mencionar que cada vez son más conscientes de su responsabilidad. Tal es el caso de Compensar que, desde su nacimiento, hace 42 años, trabaja en su propósito de bienestar integral, con alcance no solo en las personas, las familias y las organizaciones, sino también en las comunidades y las especies, articulando su quehacer diario con estrategias ambientalmente sostenibles.
Esta organización, que para el 2025 se propone disminuir en un 30 por ciento su huella de carbono, se ha dado a la tarea de generar, por ejemplo, un proceso de medición que, de acuerdo con Henry Salinas, coordinador de Gestión Ambiental de Compensar “nos ha llevado a revisar minuciosamente en áreas como alimentos y alojamiento, las materias primas, la cantidad de agua y energía consumidas, los desplazamientos realizados, la variedad de mercancías transportadas, los gases refrigerantes y el tipo de combustible utilizado por los aliados que hacen parte de nuestra cadena de valor, como una forma de realizar controles que redundan en el bienestar del planeta”, agregando que “trabajamos permanentemente de la mano con nuestros proveedores y dentro de este contexto generamos una comunidad para compartir experiencias, conocimientos y buenas prácticas, donde han sido fundamentales los aportes de aliados como la Universidad de los Andes, que desde su maestría en Administración de Empresas nos ha ayudado a generar estrategias de apoyo y colaboración”.
Una estrategia integral de intervención
Dentro de los programas y acciones desarrollados por Compensar, con impacto tanto a nivel interno como hacia la comunidad en general, se destacan: su estrategia de manejo de residuos, por medio de la cual evita que más del 80 por ciento termine en rellenos sanitarios; su programa de movilidad sostenible, que en los últimos cinco meses ha incentivado a más de 400 colaboradores a usar medios de transporte alternativos para desplazarse; la optimización de los servicios de agua y energía, que en los primeros cinco meses del año ha representado ahorros por cerca de $1.000 millones en la factura; sus construcciones eficientes, diseñadas bajo conceptos de bioclimática, dentro de las cuales la sede Calle 94 es una de las más representativas, además de destacarse las terrazas verdes de sus sedes Av. Primero de Mayo y Suba.
En cuanto a los residuos peligrosos de origen biológico, que se han incrementado por cuenta de la pandemia, y que normalmente son incinerados para su disposición final, este año la entidad ha dejado de generar 251 toneladas, gracias a estrategias de uso eficiente desarrolladas con los equipos médico y asistencial, contribuyendo a la disminución de las emisiones de CO2 en la atmósfera.
En línea con esta filosofía, Compensar ha venido también explorando el uso de energías alternativas, generando a partir de paneles solares la energía que requiere para el funcionamiento del show de fuentes interactivas en su Plaza del Jubileo, además, ha instalado 10 estaciones de carga fotovoltaicas en sus principales sedes, para la carga de celulares y computadores portátiles, y ha logrado optimizar el proceso de calentamiento del agua en sus hoteles, a lo que se suma la implementación de sistemas de aspersión para reducir la percepción de temperatura en sus habitaciones, lo que le ha significado, durante ocho años consecutivos, recibir el reconocimiento del Programa de Excelencia Ambiental PREAD, otorgado por la Secretaría Distrital de Ambiente a las empresas destacadas por su compromiso ambiental.
De esta lista de acciones también hace parte el programa “Compras Verdes”, por medio del cual busca reducir el impacto que se genera en las diferentes etapas del ciclo de vida de los productos adquiridos para el normal desarrollo de sus operaciones, a través de la definición de criterios sanitarios y de biodegradabilidad.
Además, se destaca el reemplazo de sustancias químicas para el aseo por otras más amigables con el ambiente que, a la vez, protejan la salud de quienes entran en contacto con ellas, y la migración a empaques biodegradables o reciclables en la operaciones en las que se requieren este tipo de insumos, alcanzando una participación del 92 por ciento sobre el total de empaques adquiridos; por otro lado, el programa de huertas urbanas, con el que en lo corrido del año ha impactado a cerca de 1.000 personas, entre colaboradores y proveedores.
En palabras del Coordinador de Gestión Ambiental de Compensar, en este proceso “la participación de nuestro laboratorio de innovación y el trabajo articulado entre colaboradores, proveedores, aliados y la academia, ha sido uno de los logros más significativos con miras a promover una cultura de protección del medioambiente, identificando impactos ambientales específicos en cada una de nuestras áreas, a fin de mitigarlos”.
Los retos continúan
En el corto plazo, Compensar se propone seguir desarrollando actividades pedagógicas en el marco de su programa “Con la cabeza en la tierra”, enfocadas principalmente en el uso consciente de la energía y el agua, así como incentivar la implementación de energías renovables.
De la misma forma, seguirá trabajando en la reducción de emisiones y en su plan de acción climática, dentro del cual se involucran los diferentes aspectos de la cadena de suministro, a fin de disminuir la huella de carbono en medio del proceso de reactivación económica que adelanta el país. Igualmente, la entidad seguirá llegando a las diferentes comunidades donde desarrolla proyectos urbanísticos, con talleres de sensibilización en manejo de residuos, código de colores, posconsumo, consumo sostenible y huertas en casa, entre otros.
Sin duda, estas y otras acciones son un reflejo de que el cuidado y la protección del planeta hacen parte de la agenda estratégica de Compensar, quien está convencida de que solo mediante la suma de esfuerzos es posible aportar de manera significativa a la conservación del medioambiente, favoreciendo con ello entornos sanos, saludables y seguros, que redunden en la calidad de vida de las personas, las familias, las comunidades, las organizaciones y las especies; teniendo claro que uno de los principales desafíos globales es el cambio en la percepción que el ser humano tiene sobre su rol en la naturaleza, porque solo así será posible lograr una interacción armoniosa entre todos los seres vivos, en cualquiera sus formas, de cara a la construcción de un bienestar integral y sostenible para todos.
Más información en: https://corporativo.compensar.com/