La malnutrición es una de las complicaciones más frecuentes en pacientes con cáncer. Por esta razón, llevar una dieta adecuada antes, durante y después del tratamiento es fundamental para hacerle frente a esta patología.
El cáncer es una enfermedad que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es una de las causas principales de muerte en todo el mundo. En efecto, el informe más reciente de esta entidad señala que “en 2020 se registraron casi 10 millones de fallecimientos a causa del cáncer”.
No obstante, un diagnóstico temprano y un tratamiento oportuno contribuyen a disminuir su mortalidad.. Y precisamente uno de los factores fundamentales en el tratamiento contra el cáncer es la alimentación.
Como lo señala la nutricionista y dietista Irene Trejus, quien trata y acompaña a los pacientes de la Liga Colombiana Contra el Cáncer, “la malnutrición es un factor muy común en aquellas personas que sufren este tipo de patologías. Se ha estimado que del 10 al 20 % de los pacientes con cáncer mueren más por malnutrición que por el mismo cáncer. También hay una evidencia muy robusta que demuestra que una intervención nutricional temprana, desde el momento del diagnóstico, así como, un acompañamiento nutricional durante todo el tratamiento, disminuyen los riesgos de una alimentación desequilibrada”.
Por este motivo, la nutrición y el cáncer se relacionan tanto, pues el acompañamiento nutricional impacta directamente en la calidad de vida del paciente con cáncer.
Beneficios de una buena alimentación durante el tratamiento contra el cáncer
Desde la detección del cáncer el acompañamiento de un nutricionista y dietista es de suma importancia en el tratamiento porque le ayuda al paciente a sentirse mejor, contar con un nivel elevado de energía, mantener su peso, reducir el riesgo de infecciones, entre otros.
En ese sentido la nutricionista y dietista Irene Trejus explica que “una intervención nutricional evita la caquexia, que es un deterioro progresivo de pérdida de peso corporal, así como el desgaste y la atrofia muscular. También, disminuye las infecciones, principalmente si el paciente ha pasado por una cirugía para remover algún tumor, ayudando a cicatrizar la herida rápidamente”.
Asimismo, aclara que “cuando un paciente con cáncer presenta déficit nutricional aumenta el riesgo de afectar el sistema inmune, el cual de hecho ya está comprometido por las terapias. Pero no solo eso, un déficit de proteínas puede aumentar la toxicidad de la quimioterapia o de algunos medicamentos utilizados en el tratamiento”. Por esta razón, un acompañamiento nutricional proactivo aumenta la calidad de vida y supervivencia del paciente.
Recomendaciones nutricionales para pacientes que reciben quimioterapia
La quimioterapia se basa en el uso de medicamentos para interrumpir la proliferación de células cancerígenas. Dependiendo del tipo que se administre se pueden originar posibles efectos secundarios como vómito o náuseas. Aunque en el mercado existe medicina para tratar estas síntomas, la nutricionista Irene Trejus, quien acompaña a pacientes de la Liga Colombiana Contra el Cáncer, también recomienda:
- Comer hasta que se esté satisfecho y optar por consumir comidas pequeñas y con mayor frecuencia.
- Cuando se presentan náuseas, tomar pequeñas cantidades de líquido frío y hielo picado, .si el tipo de quimioterapia lo permite.
- Evitar grandes cantidades de líquido cuando se vaya a comer algo sólido.
- Probar diferentes alimentos que el organismo tolere como tostadas, galletas de arroz o alimentos secos, los cuales disminuyen las náuseas.
- Evitar situaciones que empeoren las náuseas, por ejemplo: si están preparando comida, airear todo el ambiente para que el olor de los alimentos no produzca esa sensación de malestar.
- Consumir platos fríos, los cuales no suelen emitir ningún olor.
- Practicar alguna actividad física como caminar ayudaa que la mente se ocupe de otros temas.
- Disminuir el consumo de alimentos azucarados y altos en grasas.
Seguridad alimentaria para pacientes con cáncer
El tratamiento contra el cáncer debilita el sistema inmune, generando que se le dificulte al organismo protegerse de infecciones. Por tal motivo, es importante implementar una buena higiene alimentaria. ¿Cómo lograrlo? La nutricionista y dietista Trejus aconseja:
- Realizar lavado de manos y limpieza de superficie.
- Separar las carnes y proteínas.
- Lavar las frutas y las verduras. En el mercado existen líquidos especializados en desinfectar este tipo de alimentos.
- Evitar consumir proteínas o platos crudos como el sushi.
- Asegurar una cocción adecuada de los alimentos.
- No comprar frutas porcionadas.
- Enfriar los alimentos adecuadamente.
- Evitar consumir frutas con moho.
- Solicitar paquetes individuales de los condimentos y revisar los cubiertos cuando vayas a un restaurante. De igual forma, si queda algo restante en el plato, pedir un contenedor de alimentos para que el paciente sea quien empaque los alimentos.
- Verificar que los lugares en los cuales compras tus alimentos realicen una buena manipulación de estos.
Cabe mencionar que lo recomendable es optar por preparar los alimentos en casa.
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Si tienes cáncer o alguien cercano a ti padece este tipo de patología, es importante “consultar a una nutricionista porque esto permite realizar un seguimiento adecuado durante todo el tratamiento, evitando así que el paciente presente malnutrición y las consecuencias que esto conlleva como pérdida de peso y masa muscular”, concluye la experta en nutrición oncológica.
Seguro que con el acompañamiento de un especialista en nutrición, así como del oncólogo, podrás llevar a cabo un tratamiento adecuado para hacerle frente al cáncer.
