El fútbol aficionado gana terreno en Colombia y por medio de él, cientos de apasionados como Robinson Hernández, ven cumplido el sueño de jugar como profesionales. Conoce en este nuevo capítulo de ‘Historias que inspiran’, cómo este jugador le ha sacado partido al fútbol no profesional.
Desde muy pequeño, Robinson, apodado “El Pirata”, ha llevado el fútbol en su corazón. A los siete años, comenzó su travesía en La Equidad, un primer paso que marcaría el inicio de una carrera llena de desafíos y logros. Su talento y dedicación lo llevaron al Club Deportivo Chiqui García, donde se destacó en la segunda división. Luego, en Bogotá FC, jugó en la categoría sub 20, una experiencia que lo llevó a la liga profesional en El Salvador.
A pesar de su prometedor futuro en el fútbol internacional, las barreras económicas se interpusieron en su camino, convirtiéndose en una tarjeta roja que frenó su avance. Robinson, enfrentando estas dificultades, tomó una decisión valiente: regresar a Colombia y continuar su pasión por el fútbol en el ámbito aficionado.
Copa Trinche Andina
Actualmente, Robinson es una figura destacada en la Copa Trinche Andina, el torneo de fútbol aficionado más grande del país, que recientemente celebró su cuarta edición en las canchas de Compensar de la Av. 68 en Bogotá. Este torneo ha reunido a más de 4,000 jugadores, en donde Robinson ha figurado, anotando varios goles y demostrando que el amor por el fútbol no tiene límites.
A sus 32 años, Robinson sigue en las canchas con la misma pasión y dedicación que lo han caracterizado desde sus inicios. Cada pase, cada jugada, es una muestra de su compromiso y amor por el deporte que ha sido su vida. Ahora, planea continuar jugando durante muchos años más, sabiendo que su verdadera victoria es la pasión con la que vive cada partido.
El mensaje de Robinson para los jóvenes futbolistas es claro y emotivo: “Sigan intentando. No importa cuán difíciles sean los obstáculos, con actitud y perseverancia, cualquier sueño puede hacerse realidad.”
No te pierdas la historia de Robinson, un ejemplo de perseverancia y pasión por el fútbol aficionado. ¡Haz clic aquí para ver el video y deja que su historia te inspire!