Cuando trabajas o emprendes en lo que amas conseguirás vivir con propósito. ¿Cómo lograrlo? Conoce el método Ikigai y monetiza aquello que te apasiona.
Yvonne Melina es consultora, empresaria, coach de vida, experta en mindfulness y ciencia de la felicidad en el trabajo. No obstante para llegar ahí tuvo que atravesar un conflicto interno pues aunque su profesión: ingeniería industrial le apasionaba, no era feliz en su trabajo pues sentía que no aportaba valor, además no compartía la misión de la empresa.
Esto la llevó a tomar una decisión radical: renunció a su trabajo y a pesar de los comentarios de sus conocidos decidió viajar a Brasil a aprender portugués. En este país redescubrió sus pasiones y talentos pues conoció el mindfulness y comenzó un proceso de autoconocimiento que la llevó, en su regreso a Colombia, a certificarse en coaching esencial.
Este proceso de formación la ayudó a identificar una oportunidad de monetizar su gusto por lograr la felicidad en el trabajo, “comencé a ofrecer mis servicios de consultoría organizacional para que las empresas tengan empleados motivados, emprendimiento que me llena el corazón de alegría porque estoy aportando algo a las personas”.
¿Cómo encontrar el propósito de vida?
La mayor parte del tiempo la pasamos trabajando por ende es importante aprender a disfrutar la vida laboral. En ese sentido, el primer paso para vivir con propósito es descubrir lo que te apasiona. Sin embargo, aunque parezca fácil muchas personas cuentan con tantas responsabilidades que se les dificulta tomar decisiones radicales.
Por ello, la experta enfatiza en que “si el trabajo donde estás no es el de tus sueños empieza a buscar cómo desde ese cargo puedes empezar a servir a los demás, así sean dos o tres personas de tu equipo de trabajo. En definitiva, es explotar esos talentos y habilidades que tienes y ponerlas al servicio de los demás, así tu trabajo cobrará más sentido”.
Método Ikigai, la clave para monetizar tu propósito de vida
Ikigai es un concepto japonés que significa “la razón de ser o la razón de vivir”, es aquello que te motiva a levantarte todos los días. Para descubrirlo tienes que hacerte las siguientes preguntas:
- ¿Qué amas hacer? Es importante que cuando respondas esta pregunta elimines cualquier juicio, haz una lista de cuáles son tus pasiones, eso que disfrutas realizar.
- ¿En qué eres bueno? Seguramente tienes muchas habilidades, por eso, pregúntate en qué tipo de estas logras destacarte más.
- ¿Te pueden pagar? Analiza cómo eso que te gusta hacer puede generar ingresos. Nuevamente no te limites y abre tu mente porque eso que amas hacer sí se puede monetizar.
- ¿Cómo eso ayuda al mundo? Cuando creas un propósito seguramente mucha gente se conectará con este, así que identifica cómo tu talento le puede ayudar a alguien más.
Aplicando el método Ikigai puedes trabajar con propósito, por supuesto esto no significa que con el transcurso del tiempo no se presenten dificultades, pues como afirma la experta, “cuando uno está emprendiendo van a existir momentos de duda, por ello, hay que mantenerse firme y ser consciente de que ese es tu sueño y debes ser constante para monetizarlo”.
Por supuesto, también debes creer que sí lo vas a lograr porque si piensas que es difícil monetizar tu propósito de vida, probablemente no lo logres. Por ello, la consultora Yvonne Melina (yvonne.melina) enfatiza en “la importancia de tener claridad de tu talento y trabajar por ello”.
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Si bien al principio pienses que encontrar tu ikigai es difícil, la realidad es que no lo es pues está dentro de ti, “es conectarse con la capacidad de servir a los demás”, concluye Yvonne Melina.
Emprender con propósito es la clave para disfrutar el proceso que conlleva crear y consolidar un negocio. Así que, si quieres alcanzar tus competencias emprendedoras inscríbete a la Agencia de Empleo y Emprendimiento de Compensar.