La temporada de lluvias en Colombia podría extenderse hasta julio, y una de las poblaciones más afectadas son los niños pues se ven más expuestos a contagiarse de resfriados comunes, gripe y enfermedades respiratorias. A continuación, Ingrid Rodríguez, neumóloga pediatra de Compensar, te explica qué hacer para cuidarlos en esta época del año.
¿Qué es el resfriado común?
Es una infección viral de la nariz y la garganta (tracto respiratorio superior) causada por el rinovirus y es generalmente inofensivo. La población que lo presenta con mayor frecuencia son los bebés y niños. Por esta razón, la neumóloga pediatra, Ingrid Rodríguez señala que “los niños entre 1 a 3 años presentan cuadros gripales o de resfriado común, así como infecciones virales respiratorias o gastrointestinales (entre 10 y 12 episodios por año), sobre todo si van al jardín, generando que progresivamente su sistema inmunológico se vuelva fuerte y que con su crecimiento, cada vez, se enfermen menos”.
Síntomas del resfriado común
De acuerdo con la neumóloga Ingrid Rodríguez la sintomatología que genera el resfriado común se caracteriza por:
- Nariz congestionada
- Secreción nasal transparente o amarilla clara
- Dolor de garganta
- Tos
- Dolor de cabeza leve
- Estornudos
- Malestar general
- Fiebre entre los 38 y 40 grados
- Disminución del apetito
- Decaimiento
Ahora bien, si tu hijo presenta estos síntomas “se puede manejar con el medicamento que haya prescrito previamente su médico para controlar la fiebre, teniendo en cuenta las alergias de cada individuo; ofrecer comida blanda y líquidos de forma frecuente; higiene de nariz con suero fisiológico en aerosol nasal para mantener la nariz limpia, asimismo, guardar reposo en casa. No se debe autoformular antibióticos ni ningún otro medicamento, ya que no son necesarios, la mayoría de las infecciones en la población en general son virales, se autolimitan y no requieren antibióticos”.
Ahora bien, ¿cuál es la diferencia entre un resfriado común y una gripe? Cuando se habla de gripe se refiere a una infección de la nariz, la garganta y los pulmones causada por el virus de la influenza, mientras que el primero, generalmente se da por el rinovirus y afecta las vías respiratorias superiores.
En esta época tu hijo también puede sufrir de gripe, ante esto, la neumóloga pediatra recomienda “para el manejo de la fiebre y el malestar prescribir analgésicos, los remedios caseros se pueden usar mientras sean alimentos como frutas o verduras, y que los niños y adultos consuman en su dieta diaria como jugo de naranja o limón con miel para refrescar la garganta. En el caso de los menores de dos años, no se debe dar miel de abejas, hay que recordar que los niños tienen sus órganos aún inmaduros, por lo que no les deben dar extractos de hierbas ni otras sustancias que no estén debidamente formuladas por un médico, sean aprobadas por la FDA y el Invima para uso en niños”.
¿Cómo diferenciar una gripe fuerte de una infección respiratoria aguda?
“Generalmente los cuadros iniciales de infección respiratoria aguda y cuadro gripal se comportan de la misma manera. Lo que se debe tener en cuenta es la intensidad y duración de síntomas: fiebre que dure más de 5 días o no cede con antipiréticos, tos que dure más de 2 semanas y limite alguna actividad diaria como dormir, comer o hacer actividad física, dolor en el pecho, expectoración verdosa con sangre o amarilla espesa, dolor en la cara o en la parte frontal de la cabeza, secreción nasal verdosa o amarilla espesa. En esos casos se piensa en una complicación de la gripa y se debe consultar al médico para dar un tratamiento dirigido y esclarecer si hay algo diferente a un cuadro gripal”, explica la Dr. Ingrid Rodríguez.
Y si te estás preguntando cuándo acudir a urgencias, la Dr. Rodríguez señala que las señales de alarma son:
- Respiración rápida, hundimiento de la piel (debajo, entre costillas o en cuello) al respirar, labios o uñas moradas
- Ruidos en pecho como hervidera o pitos
- Tos de más de dos semanas de duración
- Expectoración verdosa amarilla intensa o con sangre o dolor torácico
- Vómito frecuente o dejar de recibir alimentos sólidos y líquidos
- Disminución en la cantidad de orina diaria
- Somnolencia y fiebre que dure más de 5 días o no baje después de una hora de antipirético indicado por el médico
También te puede interesar: ¿Es posible diferenciar los síntomas de Covid, resfriado o gripa?
La neumóloga pediatra concluye que “este año (2023), se espera que los picos vuelvan a las épocas en las que se presentaban siempre antes de la pandemia, es decir, invernales o de lluvias, entre los meses de marzo y mayo y nuevamente entre octubre y primeras semanas de diciembre. En estos momentos del año, se debe optimizar el lavado de manos, el uso de tapabocas si hay síntomas respiratorios y en la medida de lo posible cuidarse en casa si se presentan cuadros de resfriado común, gripe o infección respiratoria aguda para evitar que aumenten los contagios, se colapsen los servicios de salud en urgencias, hospitalización y UCI, además, se protege a la población vulnerable como son mujeres gestantes, niños y personas de la tercera edad o que tengan comorbilidades”.
De igual forma, no olvides mantener tus vacunas (influenza anual, neumococo, Covid y el esquema PAI en los niños menores de 5 años). De esta manera de proteges a ti y a quienes están a tu alrededor.
