Uno de los factores que determinan el éxito de una empresa a largo plazo se basa en generar valor económico y social. ¿Cómo crearlo y extenderlo a tus grupos de interés si tienes una MiPyme? ¡Sigue estos consejos!
¿Qué es el valor compartido?
De acuerdo con Jorge Enrique Taboada, profesional en matemáticas y estadística, especialista en administración, planeación y desarrollo de la investigación, magíster en administración de empresas y candidato a doctor en gerencia de proyectos de la Universidad EAN “el valor compartido se puede definir como un conjunto de políticas y buenas prácticas operacionales que posibilitan y mejoran la competitividad de una empresa, mejorando las condiciones económicas, culturales y sociales de las comunidades donde opera la organización”.
Por ello, Michael Porter y Mark Kramer, pioneros en el uso de este término, afirman en una publicación realizada en Harvard Business que “las empresas siguen teniendo una visión estrecha de la creación de valor, optimizando el desempeño financiero de corto plazo dentro de una burbuja mientras pasan por alto las necesidades más importantes de los clientes e ignoran las influencias más amplias que determinarán su éxito en el largo plazo”.
¿Cuál es la diferencia entre valor compartido y Responsabilidad Social Empresarial?
Ana María Bernal, coordinadora Proyectos Sociales de Compensar, explica que “el tema de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) nace de la necesidad de retribuir a las comunidades o a los lugares donde tienen presencia las empresas. Posteriormente, se presenta una maduración del concepto, se hacen preguntas más profundas para buscar una triple cuenta (económico, social y ambiental). Es así como se llega al término de valor compartido, buscando oportunidades para que todos crezcan, por eso se involucra a las comunidades para así llegar a un desarrollo sostenible, entonces el primero se relaciona con el dar y el otro con el construir”.
De todas maneras, Taboada anota que “tanto la RSE como el valor compartido son buenas, porque contemplan los impactos generados por la actividad económica, pero el objetivo es que las empresas vayan evolucionando hacia el valor compartido”.
¿Cómo las Mipymes pueden generar valor compartido?
De acuerdo con Taboada, quien cuenta con más de 14 años de experiencia en el sector empresarial, específicamente en procesos de planificación estratégica, consultorías y asesorías, además de trabajar en la docencia, proyección social e investigación “las pymes pueden optimizar en su cadena de valor el uso de recursos como la energía, el agua, tiempos de logística, promover el reciclaje, entre otros elementos. En ese sentido, también se puede rediseñar productos que interpreten mejor las necesidades y trabajen en pro de la comunidad, busquen alianzas estratégicas para la eficiencia de la cadena de valor. De igual manera, involucrar a las comunidades en su dinámica y trabajo para generar un apoyo compartido”.
Asimismo, Ana María Bernal aconseja a las MiPymes “capacitarse en este tema, conocer buenas prácticas para que se den cuenta que no es complejo ni costoso. Es ponerse en la tarea de repensar, para que ganen todos los grupos de interés, el colectivo. Por eso, infórmense, asistan a espacios de networking, intercambien conocimientos con sus pares para que se den cuenta que generar valor compartido es una apuesta para el crecimiento de la sociedad”.
Referentes de valor compartido
Compensar
Ana María Bernal señala que “desde Compensar acompañamos a empresas para que den sus primeros pasos en Responsabilidad Social Empresarial, logrando transformar su pensamiento y enseñándoles que no solo hay que generar rentabilidad sino también sostenibilidad. De esta manera, les hacemos preguntas, aclaramos las dudas y necesidades que tengan sobre estos temas. Es así como llegamos después a la aplicación de valor compartido, donde empezamos a construir de la mano de las comunidades y territorios las soluciones y planes”.
De igual forma agrega que “al interior de la empresa también se desarrollan iniciativas sostenibles y responsables para cuestionar y mejorar los procesos que realizamos, por ejemplo, cuando pensamos en uniformes nos preguntamos quién lo elaborará, con qué materiales se fabricarán y después de su uso qué se realizará con estos, así garantizamos una economía circular, generando que lo que logramos en materia ambiental también se vea reflejado en temas sociales con poblaciones vulnerables”.
Alquería
“Manejan iniciativas que involucran educación, ganadería sostenible, economía circular, energías renovables, cuidado del agua. Han recibido premios por realizar un desarrollo sostenible con honestidad”, señala Jorge Taboada.
Bancolombia
Jorge Taboada también destaca a Bancolombia porque “ha generado beneficios en tasas de interés, efectuado procesos de financiación sostenibles al grupo de la empresa por más de 300 mil millones atados al cumplimiento de indicadores ambientales y sociales”.
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Generar valor compartido les permite a las empresas contribuir no solo desde el ámbito económico sino también desde lo social y ambiental. Esto genera un beneficio a largo plazo pues los consumidores confían más en este tipo de organizaciones.
Dato adicional: recuerda que si tienes una MiPymes puedes inscribirte a los Centros de Transformación Digital Empresarial.